Abril-Junio 2016 66
ISSN 1317-987X
 
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Bioquímica
Drogas antidiabéticas diferentes de la insulina. Mecanismos de acción

Tiazolidinedionas o Glitazonas

En la última década se ha demostrado que la activación farmacológica del receptor de proliferación de peroxisoma activado (PPAR por sus siglas en inglés) muestra efectos beneficiosos tanto en el síndrome metabólico como en la DT2 (57). Las tiazolidinedionas o glitazonas son drogas que activan los PPARs, motivo por el cual discutiremos algunas características de estos últimos.

Receptor de proliferación de peroxisoma activado.

Los PPARs son una subfamilia de los receptores hormonales nucleares (58) que funcionan uniéndose a factores de transcripción activados, regulando varios procesos biológicos. Estos receptores fueron descubiertos por el uso de clofibratos, muy pronto después se encontraron un número de compuestos que comparten la característica de incrementar la proliferación de peroxisomas por incrementar la actividad de los PPARs y al cabo de poco tiempo el primero de los PPARs fue clonado (59). En la actualidad se conoce que existen 3 isoformas de PPAR: α, β/δ y ϒ, todas ellas participan fundamentalmente en la regulación de la expresión de un buen número de genes relacionados con la regulación del metabolismo intermediario de lípidos y carbohidratos y de otros aspectos importantes tales como la adipogénesis, la sensibilidad a la insulina, la respuesta inmune y el crecimiento y diferenciación celular (60). Se ha identificado una variada gama de activadores de los PPARs, tanto endógenos como sintéticos (61), una vez activados estos receptores reclutan a coactivadores y rechazan a corepresores condicionando una remodelación de la cromatina y activan la transcripción de genes. En vista de la muy diversa distribución tisular de las isoformas de los PPARs se ha demostrado el incremento de actividades muy diversas como: adipogénesis, oxidación de ácidos grasos y antiinflamatorios (62).

Las tres isoformas de los PPARs tienen características estructurales y funcionales similares, poseen cuatro dominios: En el extremo N-terminal se encuentra el dominio A/B, el cual contiene una función activadora independiente de ligando 1 (AF-1) la cual es responsable de la fosforilación del receptor. El dominio que une ADN, denominado C, que condiciona la unión del receptor al elemento que responde a PPAR (PPRE, por sus siglas en inglés) en la región promotora de los genes. El dominio D es el sitio de unión de los cofactores. El dominio E/F es responsable de unir al ligando específico luego de lo cual el dominio C cambia de conformación incrementando la afinidad de PPAR por PPRE aumentando la transcripción de los genes. En el dominio E/F también se encuentra la función activadora independiente de ligando 2 (AF-2 por sus siglas en inglés) que incrementa la unión a los cofactores (63). (Ver Figura 4)
Figura 4. Dominios y sus funciones de los PPARs. Para detalles ver el texto.

El modelo más aceptado de activación de los PPARs consiste en su unión con el receptor nuclear del ácido retinoico (RXR por sus siglas en inglés), el dímero resultante se une a la secuencia del ADN AGGTCA-XAGGTCA en la región promotora de los genes, la cual no puede ser transcrita por la presencia de una variedad de correpresores, estos últimos se disocian y por el contrario se unen al complejo los coactivadores condicionando la modificación de las histonas por acetilación, activándose los genes (64). Los PPARs pueden unirse al RXR u otros receptores nucleares como la proteína de golpe calórico o el receptor de las hormonas tiroideas, estando solubles en el citosol o en el núcleo esperando unirse a un ligando apropiado para ejercer su papel fisiológico.

El dominio E/F, el que une los ligandos, es un espacio muy grande (1300 Å) con una secuencia de aminoácidos que varía de una isoforma a la otra lo cual condiciona que puedan unirse a una amplia gama de moléculas naturales o sintéticas, entre las primeras se encuentran ácidos grasos ω-3; ω -6 y algunos derivados de su oxidación incluyendo prostaglandinas y leucotrienos (65). Entre los compuestos sintéticos que se unen a los PPARs se encuentran: fibratos, clofibratos y las tiazolidinedionas (TZDs).

PPAR ϒ y DT2

El PPAR ϒ se expresa en mayor cantidad en los tejidos adiposo, inmunológico/inflamatorio, mucosa de colon y ciego y en la placenta y muy poco en el músculo esquelético y el hígado; de el de describen 3 isoformas que derivan del mismo gen pero que resultan de inicio en tres promotores diferentes.

Las tiazolidinedionas (TZDs) o glitazonas (roziglitazona, troglitazona y pioglitazona) son compuestos sintéticos, conocidos antidiabéticos que son agonistas que activan el PPAR ϒ y entre cuyas propiedades están mejoría de la resistencia a la insulina y disminución de la glicemia en pacientes con DT2; aun a bajas concentraciones muestran sus efectos beneficiosos sobre los tejidos adiposo, muscular y hepático (66). La activación de los PPAR ϒ por TZDs incrementa la sensibilidad de los adipocitos a la insulina probablemente por un efecto directo sobre los genes que codifican alguno de los componentes de la señalización de la hormona (67), incrementándose la deposición de lípidos y disminuyendo la liberación de ácidos grasos. Los efectos beneficiosos de la administración de TZDs son atribuidos a un efecto primario sobre el metabolismo del tejido adiposo lo cual se refleja en los tejidos muscular y hepático. Por efectos de las TZDs se produce una remodelación del tejido adiposo, hay diferenciación de los adipocitos del tejido celular subcutáneo, con lo cual se producen adipocitos pequeños sensibles a la insulina al mismo tiempo que se condiciona apoptosis de los adipocitos viscerales, más grandes, viejos e insensibles a la insulina (68). Además se ha descrito un incremento de la degradación de los triacilgliceridos circulantes y su deposición en el tejido adiposo.

Un aspecto interesante de mencionar es que estas drogas por un efecto directo, aun no conocido disminuyen la lipotoxicidad sobre las células β de los islotes pancreáticos (69).

La activación de los PPAR ϒ por TZDs condiciona la expresión de la proteína asociada c-Cbl cuya concentración se correlaciona bien con la sensibilidad del tejido a la insulina (70). Además la activación de PPRA ϒ incrementa la cantidad de adiponectina, una hormona producida por el tejido adiposo, la cual se encuentra baja en los pacientes con DT2. Entre las funciones de la adiponectina se encuentran: aumentar la oxidación de los ácidos grasos en hígado y musculo esquelético, incrementar la sensibilidad a la insulina de hígado y musculo esquelético y una disminución de la producción hepática de glucosa, resultando en una disminución de los niveles circulantes de ácidos grasos libres, triacilgliceridos y glucosa (71).

Es bien conocido el efecto anabolizante de la insulina, incrementa la síntesis de lípidos, carbohidratos y proteínas y disminuye su degradación, el efecto primario es el incremento de la entrada de glucosa a las células musculares y adiposas mediado por el incremento del número de transportadores GLUT 4 en la membrana plasmática más que a cambios en las características cinéticas del mismo (72).

La estimulación de los PPAR ϒ por TZDs reduce la hemoglobina glucada (Hb-A1c), la glicemia en ayunas y postprandial y la insulinemia en pacientes con DT2 como consecuencia de una mayor sensibilidad a la insulina. Aún más las TZDs incrementan la utilización del glicerol en la síntesis de triacilgliceridos con lo cual se disminuye la cantidad de ácidos grasos libres que son pasados a la circulación desde los adipocitos; disminuyendo la lipotoxicidad de hígado, músculo esquelético y páncreas, logrando una reducción en la producción hepática de glucosa y un incremento en la utilización de glucosa por músculo y tejido adiposo todo lo cual contribuye al efecto hipoglicemiante de las TZDs (73).

La activación de los PPAR ϒ por TZDs reduce el estado crónico inflamatorio del tejido adiposo presente en los pacientes con DT2 producido por el incremento de las citoquinas: tales como la resistina, el factor de necrosis tumoral y la interleuquina 6, las cuales aumentan la resistencia a la insulina.

Liang, et al. (74) han encontrado que flavonoides como el kanferol, entre otros, pueden estimular los PPAR ϒ pudiendo ser útiles en el tratamiento de la diabetes y el síndrome metabólico.

La activación de los PPAR ϒ por las TZDs produce efectos beneficiosos en la arterioesclerosis y en la inflamación (73) pero dichos aspectos están fuera del alcance de este trabajo.

La activación de las otras dos isoformas PPAR α y β/δ es beneficioso en la diabetes y el síndrome metabólico (73) pero no son capaces de unirse a las TZDs motivo por el cual no se discutirá sobre ellos en este trabajo.


Continua: Secretagogos

Drogas antidiabéticas diferentes de la insulina. Mecanismos de acción
Introducción
Sensibilizadores
AMP Quinasa
Otros efectos de la metformina
Tiazolidinedionas o Glitazonas
Secretagogos
Incretinas y los agonistas del receptor de Incretinas
Inhibidores de la dipeptidil peptidasa 4
Referencias

NOTA: Toda la información que se brinda en este artículo es de carácter investigativo y con fines académicos y de actualización para estudiantes y profesionales de la salud. En ningún caso es de carácter general ni sustituye el asesoramiento de un médico. Ante cualquier duda que pueda tener sobre su estado de salud, consulte con su médico o especialista.





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