Los
resultados obtenidos coinciden con lo
hallado por otros autores para la variable edad, lo encontrado concuerda
con los trabajos de Gasperi(7), Cardozo et al(8) y Soria
et al(10), quienes describieron edades entre 18 a 19 a?os en su
mayoría. Igualmente predominio del sexo femenino, como en investigaciones de
otros autores (1,11-17). La incorporación de la mujer al mundo
laboral y universitario en todas las carreras, es una circunstancia que podría
explicarla.(17) Compean, et al.(18), encontraron que
más hombres que mujeres eligieron carreras en el área de la salud por prestigio
social y para obtener cargos importantes, y en las mujeres la elección
principal fue por considerarlo adecuado a su sexo y el interís por cuidar de
los demás. Otras
variables SD estudiadas tales como disfrutar de becas para sus estudios y el
lugar de residencia. Observamos en ambas universidades que el porcentaje más
relevante se ubica en los no becados. Esto era de esperarse ya que el estrato
social principalmente encontrado fue el de los más favorecidos econ?micamente (Fig
1), en concordancia con algunos autores que encontraron que en las muestras
estudiadas, en su mayoría provenían de clases sociales altas (16),
medio altas (7,8,19) o clase media (14,20), o de
procedencia intelectual (21). Sin
embargo, al comparar la muestra venezolana se encontr? un mayor porcentaje de
estudiantes que pertenecían a los estratos sociales más bajos (medio bajo y obrero:
24,2%) en relación con los estudiantes espa?oles (16%), lo cual se ajusta con
el mayor porcentaje de becados en la UC de 20,8% vs 16% en UAM, y, mayor
porcentaje de estudiantes venezolanos (22,2%) que tienen que trabajar mientras
estudian o están de vacaciones, que en la muestra espa?ola (10,4%), a?n cuando
no se evidenció significancia estad?stica para esta éltima variable. No se
encontraron, estudiantes de estrato marginal (el más bajo nivel socioecon?mico
según la escala de Graffar), lo cual coincide con Ram?rez(22), quien
describe que solo el 4% de los admitidos en la Universidad de los Andes,
pertenecían al nivel 5, quedando eliminados los j?venes del estrato V de
Graffar (pobreza cr?tica). Llama
la atención que el porcentaje de estudiantes de los estratos socioecon?mico más
bajos en la UAM, fue menos de la mitad que el casi 30% de los estudiantes de la
UC para los mismos estratos. Esto podría tener relación con el dif?cil
acceso o la poca expectativa de
movilidad social que pueda estar generando en los j?venes menos favorecidos, el
hecho de cursar una carrera universitaria, ya sea en un país de la Unión
Europea como Espaía, cuyo statu quo recientemente
ha vivido sobresaltos de inconformidad social, o en un país como Venezuela, en
el que lamentablemente la jerarquización de valores no tiende a inclinarse
hacia la formación universitaria y la cultura del trabajo, sino más bien hacia
la cultura clientelar y la ?viveza criolla?. Con
respecto al status laboral, Panella y Mussolini(19) encontraron que
en su muestra, 84,9% de los alumnos solo estudian, y 15,1% estudian y trabajan,
en cuanto que solo 6% recibe ayuda econ?mica, cifra muy inferior a la
encontrada en nuestras muestras.
En cuanto a la filiación religiosa la mayoría manifestá ser
catélicos, correspondiendo con las publicaciones de Millan et al(14) y
Valle et al(20). Sin embargo, hubo diferencias significativas (Z=
-6; p= <0,001) en las muestras, ya que entre los estudiantes espa?oles hubo
más ateos o no creyentes que en los venezolanos; dicho porcentaje duplic? al de
la población general espa?ola (20%), según datos reportados por Injuve.(23).
Con
respecto al antecedente de familiares médicos, ambas muestras en su mayoría negaron tener
familiares médicos mostrando diferencia estad?sticamente significativa. Entre
los autores revisados (7,8,14,16,19,20,24), se reportan
porcentajes entre 16,4% y 66,33% para los estudiantes que tenían
algún familiar trabajador en el área de la salud, aproximíndose dichas cifras a
la encontrada en nuestras muestras.
Se concluye que para las muestras de estudio se
encontraron edades similares entre 18 a 19 a?os en su mayoría, con
predominio del sexo femenino; no
becados, solo estudiando en cuanto al status laboral. El Estrato social en su
mayoría fue el de los más favorecidos econ?micamente, con diferencias
estad?sticamente significativas al relacionar ambas muestras. En su mayoría
manifestaron ser catélicos con diferencias significativas en las muestras y en
cuanto a tener algún familiar trabajador en el área de la salud, ambas muestras
en su mayoría negaron tener familiares médicos con diferencias estad?sticamente
significativas en los grupos.