El estoicismo, hedonismo, neo-narcicismo y su relación con la cirugía
Introducción
Históricamente
la filosofía y la medicina han estado relacionadas; debido a que los primeros
conocimientos de la medicina fueron realizados por grandes exponentes de ambas
ramas. Por otra parte, con los avances de la medicina, se puede decir que fue
cobrando distancia entre estos dos campos en cuanto a la generación de conocimientos
sobre el cuerpo humano; no obstante, en la actualidad se puede establecer una
relación entre la filosofía y la medicina, desde una perspectiva ética y de la
personalidad que caracteriza al médico (1).
La
personalidad de los profesionales de la salud, siempre ha sido objeto de
estudio. Se podría decir, que los prejuicios han establecido las
características de las diferentes personalidades, siendo los rasgos más
dominantes, los factores determinantes en la escogencia de la especialidad
médica.
La
cirugía se considera una de las especialidades que conlleva mayor exigencia,
por sus largos periodos de trabajo y la confrontación de situaciones en las
cuales se manejan altos niveles de estrés y que pueden concluir en episodios de
decepción o de frustración. No obstante, la personalidad del cirujano puede
variar entre individuos del mismo campo, por diferencias entre la cultura de su
desarrollo, desde un punto de vista social o institucional. Vincent et y cols. (2),
en su estudio “Exploring the surgical
personality”, establecen que la personalidad del cirujano se caracteriza
por: extroversión, trabajo en equipo, técnicas manuales competentes,
amabilidad, escrupulosidad. Asimismo, lograron evidenciar que una mayor
estabilidad emocional estaba significativamente relacionada con la satisfacción
del paciente y la recomendación del médico por parte del paciente a otros
pacientes (2). |