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Estimar el riesgo real de infección de acuerdo al itinerario y el riesgo de enfermedad severa, según la condición clínica del viajero (embarazo, inmunosupresión). Es crítico definir la accesibilidad del lugar a visitar, la posibilidad de comunicación telefónica y la disponibilidad, o no, de facilidades para el diagnóstico y tratamiento de la malaria.
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Reducir contacto con anofelinos, especialmente al atardecer y al amanecer (mediante el empleo de mosquiteros, ropa adecuada, repelentes de uso ambiental o personal).
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Identificar los esquema de quimioprofilaxis más apropiados y definir la eventual conveniencia de autotratamiento (terapia "stand by"), advirtiendo sobre los efectos colaterales potenciales y su manejo
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Definir la necesidad o no de tratamiento terminal presuntivo con Primaquina para la prevención de recaidas de P. vivax.
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Aconsejar al viajero internacional sobre la conveniencia de adquirir con anticipación y traer consigo las dosis del los medicamentos antimaláricos requeridos para la quimioprofilaxis (y/o eventual autotratamiento) durante el lapso estimado de permanencia.
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Alertar al viajero sobre necesidad de evaluación diagnóstica en caso de presentar fiebre al regresar
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Suministrar una información detallada y actualizada sobre los centros de notificación de malaria y de administración de medicamentos existentes en el área a visitar