Alejandro Mondolfi
No se debe bajar la guardia ante el actual brote de fiebre amarilla
Población vulnerable y Riesgos de la vacunación
Población vulnerable
De acuerdo a Mondolfi, no sólo las personas que se internan en las regiones selváticas deben vacunarse. “También deben hacerlo las personas que estén cercanas a los focos de la enfermedad. Si los casos están ocurriendo en las fronteras de Táchira con Apure, esa población debería estar dentro del plan de vacunación”.
Según Mondolfi, las poblaciones urbanas vecinas a los focos pueden ser afectadas por la enfermedad, porque los pacientes siempre son trasladados a hospitales grandes ubicados en las ciudades cercanas. “Si ocurre una infección de Aedes aegypti en esos lugares, la fiebre amarilla se puede propagar. Esos son los sitios en los que debería llevarse a cabo un plan de vacunación importante”.
Riesgos de la vacunación En opinión de Mondolfi la vacuna contra la fiebre amarilla “es una de las mejores que existen, con una inmunidad prolongada – 8 a 10 años-, prácticamente sin riesgo en los adultos”.
Sin embargo, el tropicalista advierte sobre algunos grupos de la población en los cuales la vacuna podría implicar algunos riesgos. “Los portadores del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), es preciso tener muchísimo cuidado, porque presentan alteraciones en su sistema inmunológico y en el caso de fiebre amarilla, la vacunación es de un virus vivo. No está formalmente contraindicada en este grupo de la población y si es necesario, debe hacerse. Pero no se trata de pacientes en los que la vacunación se realice con total tranquilidad. Ni estos, ni cualquier otra persona que padezca alguna enfermedad que comprometa su inmunidad”.
Mondolfi también incluye a los niños menores de un año entre quienes corren riesgos al ser vacunados contra la fiebre amarilla.”Los pocos casos que presentan problemas luego de la vacunación se observan en los grupos de infantes de esa edad”. |