Marzo-Mayo 2001 7
ISSN 1317-987X
 
Buscar




Personajes
 
 
Reinaldo Di Polo
Fisiólogo



Reinaldo Di Polo
Un apasionado de la Investigación
Fecha de recepción: 31/12/2000
Fecha de aceptación:
31/12/2000

Es conocido entre sus colegas como "el calamar", pues gracias a la pasión con la cual se ha entregado al estudio de la célula nerviosa de este animal, este Premio Nacional de Ciencias ha hecho importantes descubrimientos, entre ellos, la Bomba del Calcio. Se considera un experimentalista por excelencia, pero también reconoce que la música y el mar son dos elementos importantes en su vida. Por esta razón, admite disfrutar de otras actividades como la ejecución del saxofón y la navegación.

Claudia de Oliveira




Una referencia en el mundo de la fisiología

Para ser Premio Nacional de Ciencias, Reinaldo Di Polo tiene un aspecto bastante informal y jovial. De sonrisa franca y acompañando sus ideas con gestos y dibujos, se halla muy distante de ser como aquellos tradicionales científicos de barba, que pasan gran parte de sus vidas encerrados en un laboratorio.

Sin embargo, estas características no le han impedido convertirse en toda una referencia en el campo de la fisiología, tanto a nivel nacional como internacional. Su renombre no ha sido ganado en vano: varios reconocimientos, numerosas publicaciones y más de 35 años de labor, lo confirman.

No le gusta hablar de su reciente galardón como un logro personal. De hecho, cuando se refiere a algún acontecimiento importante de su carrera, suele comentarlo en plural, incluyendo así a los diversos especialistas y estudiantes que han colaborado con él en sus investigaciones. "El premio, obviamente, es un reconocimiento muy importante, sobre todo al laboratorio, a la labor que hemos venido haciendo desde el año 71", comentó.

Aunque todavía se queda sin palabras cuando se le pregunta al respecto, a tres meses de haberlo recibido, es capaz de reflexionar sobre él con un poco más de frialdad. "Este es un premio que es muy difícil ganarlo. En Venezuela, aunque somos pocos científicos, hay gente muy buena con mucho reconocimiento nacional e internacional, por lo que la competencia es muy cerrada. En este premio entran en juego una serie de factores, de cosas... no políticas por supuesto, pero sí dependen de los que te proponen, del jurado y de muchas otras cosas. Este premio tiene la misma logística que el Premio Polar, lo que lo hace bastante selectivo", refirió.

¿Qué nuevos retos le plantea la obtención de esta distinción?

El reto es seguir, o tratar de seguir, haciendo más y mejor ciencia de calidad. Para nuestro grupo de trabajo el premio ha sido muy importante por el reconocimiento que ha tenido el laboratorio dentro de la comunidad científica nacional e internacional. Yo creo que el Premio no sólo abre la posibilidad de conseguir más fondos para la investigación, sino que le da un gran prestigio a la labor que ha hecho la gente aquí.

Además del Premio Nacional de Ciencias, Mención Ciencias Naturales y Exactas obtenido en noviembre del 2000, este profesional, graduado de Médico Cirujano en la Universidad Central de Venezuela (UCV) en el año 1966, ha sido galardonado con otros reconocimientos como el Premio Pi Suñer, el cual recibió en dos oportunidades (1962 y 1980, respectivamente) y el Lorenzo Mendoza Fleury, entregado por la Fundación Polar en 1983.

La importancia de este investigador se ha visto reflejada por el hecho de ser uno de los autores más citados a nivel académico y por la gran cantidad de trabajos divulgados a través de revistas científicas, de gran prestigio, como la Journal of General Phisiology, la Biochimica et Biophisica Acta, y Nature. Sobre esta última el entrevistado acotó: "Cuando descubrimos la Bomba de Calcio, eso nos dio la posibilidad de hacer tres publicaciones en esa revista que es la mejor revista científica en el mundo. Es muy difícil publicar allí".

Especialistas como Luis Beaugé, Carlo Caputo, Madalina Condrescu, Francisco Bezanilla, Isabel Llano, Ramón Latorre y Eduardo Perozo son algunos de los profesionales que han trabajado en colaboración con el laboratorio del Dr. Di Polo. Entre todos ellos, mención especial merece Luis Beaugé, científico con quien ha cooperado desde el año 1976. "Es el gran colaborador que he tenido en mi carrera científica -destaca el entrevistado-. No trabaja aquí, trabaja en Córdoba, Argentina. Nos conocimos en una reunión científica en 1974 cuando Luis era, y sigue siendo, un especialista en la Bomba Sodio-Potasio. En 1976 nos ganamos una subvención de la National Science Foundation para trabajar durante un mes al año en uno de los más prestigiosos laboratorios de Biología Marina de la costa este de los Estados Unidos. Esta subvención ha sido renovada todos los años hasta el día de hoy. Allí se hace mucha neurofisiología".

Igualmente, reconoció la cooperación de "muchos pescadores amigos del pueblo de Mochima y a la Estación de Biología Marina (Fundaciencias-IVIC), también de este pueblo, que nos ayudaron en estas investigaciones".

Por otro lado, este personaje no sólo se ha desempeñado en el área de la investigación y experimentación. También ha sido docente del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) y de la UCV, impartiendo clases de pre-grado, post-grado y cursos especiales. Ha sido profesor visitante en la Universidad de Rockefeller, Estados Unidos y ha organizado diversos eventos como la Primera Conferencia Internacional del Intercambio de Sodio/Calcio.

Asimismo, ha formado parte de diversas sociedades científicas como la Asociación Venezolana para el Avance de la Ciencia (ASOVAC) estando en su directorio, la New York Academy of Science y la Academia Latinoamericana de Ciencias (ACAL), entre otras. Además, en varias oportunidades, ha sido miembro de diversos equipos de trabajo, tanto en el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICIT) como en el Ministerio de Ciencia y Tecnología. En este último, fue integrante de la comisión de Promoción del Investigador.



Una referencia en el mundo de la fisiología
El calamar, un gran aliado
Descubrimientos que marcaron pauta
Un amante de la música y el mar
Hacer ciencia: un reto difícil

NOTA: Toda la información que se brinda en este artículo es de carácter investigativo y con fines académicos y de actualización para estudiantes y profesionales de la salud. En ningún caso es de carácter general ni sustituye el asesoramiento de un médico. Ante cualquier duda que pueda tener sobre su estado de salud, consulte con su médico o especialista.





Instituto de Medicina Tropical - Facultad de Medicina - Universidad Central de Venezuela.
Elaborado por el Centro de Análisis de Imágenes Biomédicas Computarizadas CAIBCO,
caibco@ucv.ve
Este portal ha sido desarrollado gracias al apoyo del Fonacit