La XIV Conferencia Internacional sobre SIDA AIDS 2002, recibió casi 10.500 resúmenes de líderes científicos de todo el mundo, profesionales, representantes de comunidades, y gente que vive con VIH. Este es el número más elevado de presentaciones que se ha recibido en la historia de las series de eventos internacionales sobre esta enfermedad. Organizado por la Sociedad Internacional de SIDA desde 1985, este evento se ha convertido en una de las reuniones mundiales más importantes que se concentran en la epidemia, y crea un foro mundial para la discusión de las muchas cuestiones sociales y médicas que rodean este mal.

"Las conferencias internacionales del SIDA han sido recordadas por algún hecho concreto. Vancouver, se recordó por los "cocteles" de medicamentos; Durban, por ser el primer país en vías de desarrollo que organizaba una conferencia dónde, además, se consiguió sensibilizar tanto a la opinión pública como a la política. Barcelona, desde el punto de vista de hallazgos científicos, puede pasar a la historia como la primera conferencia en la que se aportan datos sólidos de vacunas, sobre todo de vacunas terapéuticas. El otro mensaje, más social, es que esta reunión está enfocada, como dice el lema de la conferencia, a la aplicación inmediata y puesta en práctica de todo lo que hemos aprendido. De alguna manera, los conocimientos científicos en el campo del SIDA están desarrollados y han sedimentado. El compromiso político y social se alcanzó en Durban y ahora hay que aplicarlo", comentó antes del evento Josep M. Gatell, copresidente de la XIV Conferencia Internacional del SIDA, Barcelona 2002, a la publicación electrónica Biomedia, servicio del Observatorio de la Comunicación Científica de la Universidad Pompeu Fabra, Barcelona, España.

Durante la presentación, Jordi Casabona, también copresidente del evento, expuso que hablar del virus del SIDA y de la enfermedad supone hablar de "un problema internacional de gran magnitud que amenaza el desarrollo de los países", por lo que la respuesta a la epidemia debería realizarse "desde la perspectiva de los derechos humanos".

Las cifras de la ONU para las víctimas fatales que provocó la enfermedad en el 2001 son desalentadoras: 3 millones de personas, de las que 580.000 eran niños menores de 15 años. Se estima que alrededor de 14.000 personas se infectan con el VIH cada día. La gran mayoría vive en los países más pobres de África, el continente que ostenta la dolorosa cifra de 12 millones de huérfanos surgidos de este mal.

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