Dada la participación del bulbo olfatorio en diversas
afecciones neurológicas(1–11) y siendo ampliamente conocida la
composición histológica del bulbo olfatorio adulto, como lo demuestran los
resultados de diversos investigadores, utilizando diferentes vías metodológicas
como son tinciones clásicas de Nissl y de Golgi(12-19), estudios
experimentales con técnicas de degeneración(20), estudios
fisiológicos(21) y análisis ultraestructurales(22-27), es nuestro interés profundizar en el conocimiento de
la diferenciación neuronal del mismo, para establecer tanto el momento
maduracional en el cual cada tipo celular alcanza su citotípia, como el inicio
de las conectividades neuronales hasta su consolidación definitiva. Esta
información es fundamental para el desarrollo de biomodelos experimentales
donde se puedan reproducir situaciones
patológicas y discriminar la participación de alguno o de varios tipos
celulares y determinar la integridad y/o las alteraciones de la sinaptología
bulbar.
El sistema olfativo durante el desarrollo embrionario y postnatal
temprano muestra una gran plasticidad citológica, siendo un modelo ampliamente utilizado por
distintos investigadores(17-18,28-30) para tratar de entender los mecanismos relacionados con el crecimiento
y funcionalismo neuronal durante los procesos de formación y consolidación del
sistema nervioso, al ser un sistema donde se establecen diversidad de interacciones
sinápticas(31-32), cuyo
comportamiento fisiológico desde el punto de vista de la neurotransmisión ha
sido previamente estudiado por nosotros tanto en el desarrollo in situ como in vitro(33). Como elemento de enlace periferia-centros
nerviosos centrales, en el bulbo olfatorio desempeñan una importante función
los glomérulos olfatorios, estructuras ampliamente
estudiadas por otros autores (18,28,30,34), que están formadas
por los axones de las neuronas sensoriales olfatorias, las dendritas de las
principales células de proyección del bulbo como son las células mitrales y las
células en penacho; participando además,
las células granulosas(35-38) y las células periglomerulares al establecer
contactos sinápticos con las células mitrales. Para que se cumpla el proceso de integración de la información que
ingresa y egresa a nivel del bulbo olfatorio, intervienen dos tipos celulares
principales: las células mitrales y las células en penacho(39-40), las cuales reciben la información de las
neuronas sensoriales olfatorias a través de las estrías olfatorias intermedia y
lateral, procesan dicha información y la
transmiten a la corteza olfatoria(41). Esta
multiplicidad de conexiones conlleva al procesamiento de una alta cantidad de
información neuronal que emerge del
bulbo olfatorio a través del haz olfatorio(41-42).
El
objetivo del presente trabajo es estudiar los cambios citoarquitectónicos que
ocurren durante el desarrollo prenatal tardío
y el postnatal temprano del bulbo olfatorio del ratón NMRI, con el fin
de lograr, por medio del análisis de la morfogénesis y
la formación de las sinapsis, una mejor
comprensión de su funcionalidad, lo cual
permitirá inferir en mecanismos
biológicos básicos que puedan intervenir en el establecimiento de enfermedades
en las cuales esté involucrado el bulbo olfatorio.