Farmacología
Efecto nefrotóxico causado por cisplatino mediante su acumulación a través de proteínas transportadoras
Transporte de cisplatino en el riñón a través de los transportadores
El cisplatino como se describió anteriormente posee una alta actividad nefrotóxica, que
frecuentemente se manifiesta con desórdenes de agua y electrolitos e injuria renal aguda en
forma de necrosis tubular. Si el tratamiento con cisplatino es prolongado puede producirse injuria
intersticial secundaria, que lleva finalmente a enfermedad renal crónica. A nivel renal, el cisplatino primeramente penetra en las células del segmento S3 del túbulo
proximal, sitio más afectado por este fármaco. El túbulo proximal al perder el epitelio, que es el
encargado de favorecer el flujo de sustancias en las células, genera un aumento en la
concentración de la orina y a su vez se incrementa el potencial tóxico en el fluido tubular y la
difusión pasiva de toxinas a la célula tubular, por lo que el cisplatino puede ser transportado
fácilmente a la célula tubular ya sea por difusión pasiva o por difusión facilitada por
transportadores4. La entrada del cisplatino a estas células es mediada principalmente por el transportador de
cationes orgánicos 2 (del inglés organic catión transporter 2 -OCT2) codificado por el gen
SLC22A2, perteneciente a la familia de transportadores de solutos (SLC) también llamados
transportadores de cationes orgánicos (OCT), que tienen un rol importante en la captación de
fármacos catiónicos en los tejidos. Se han descrito hasta la fecha tres isoformas OCT: OCT1/SLC22A1, en humanos expresado en la membrana sinusoidal del hígado pero no en riñón;
OCT-2, aislado por primera vez de riñón de rata y luego localizado en la membrana basolateral
del epitelio del túbulo proximal en humanos y OCT-3/SLC22A3, predominantemente expresado
en placenta pero además en el intestino y riñón. Además se puede encontrar dentro de la familia
de los SLC, al transportador de cobre 1 (CTR1) que es codificado por el gen SLC31A1, cuya
estructura es tipo canal y está localizado también en hígado y riñón, específicamente en la
membrana basolateral del epitelio del túbulo proximal5
. Este transportador tiene importancia
relevante sobre los efectos anticancerígenos de agentes con platino y en el transporte de
cisplatino hacia las células tubulares. Por otro lado, OCT es un transportador activo cuya fuerza
motriz es un potencial de membrana negativo interno y la captación celular mediada por este
tipo de transportador es concentradora, es decir tiende a acumularse mayor cantidad de sustrato
en la célula, mientras que el transporte mediado por CRT1 es equilibrado5
. Por estas
características funcionales se pudiera decir que la actividad de OCT es más fuerte que la de
CRT1. La salida de cisplatino de la célula tubular está regulada a través de los transportadores de
expulsión multidrogas y toxinas 1 (MATE-1) codificado por el gen SLC47A1, también
perteneciente a la familia de transportadores SLC; fue identificado por primera vez en el año
2005 por Otsuka y colaboradores y localizado en riñón, hígado, músculo y varios tejidos. Más
tarde, su homólogo riñón específico MATE-2/SLC47A2 fue clonado. Ambos se localizan en los
bordes en cepillo de la membrana apical de las células del túbulo proximal de los riñones y
median la salida de fármacos catiónicos a través de un gradiente opuesto de protones que
actúan como fuerza motriz, generando un transporte antiporte5
. En la Tabla 1 se muestran
algunas características de los transportadores OCT y MATE. Tabla 1. Características de los OCT y los transportadores antiportes de cationes orgánicos/ H+. 
Tomada y modificada de Yonesawa y col. 2011. Otro transportador que está involucrado en la salida de cisplatino de la célula es la proteína de
resistencia multidrogas 2 (MRP2), que también está localizado en la membrana apical del riñón.
Es una proteína perteneciente a la superfamilia de transportadores de eflujo de unión a ATP
(superfamilia ABC). Se han identificado aproximadamente 50 miembros de esta familia en
humanos, que se dividen en 7 subfamilias (de la A hasta la G), de las cuales tres de ellas tienen
gran relevancia en la defensa contra los xenobióticos: la glicoproteína P MDR1 (subfamilia
ABCB1), el MRP2 (subfamilia ABCC2), ya descrito previamente y la proteína relacionada al
cáncer de mama (BCRP; ABCG2). El MRP2 se expresa tanto en tejidos malignos como no
malignos y posee un rol importante en el transporte de diversos fármacos, agentes
anticancerígenos, entre los cuales destaca el cisplatino y toxinas, incluyendo conjugados de
glucoronato, sulfato y glutatión (GSH). Esta proteína puede realizar cotransporte o transporte
simple pero siempre es dependiente de la hidrólisis de ATP6
. Es así como la actividad de la
entrada y salida mediada por los transportadores descritos determina la cantidad acumulada de
cisplatino en el riñón, la cual se correlaciona positivamente con la nefrotoxicidad causada por el
fármaco7. |