Acumulado Enero - Diciembre 2023 (93 - 96) 93
ISSN 1317-987X
 
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Gastroenterología
Quiste hepático gigante. Descripción de un caso

Introducción

Los quistes solitarios del hígado constituyen una entidad conocida desde el siglo pasado. Según Geist y col(1) el primero fue informado por J.Michel en 1854, otros autores lo atribuyeron a A. Bristowe en 1855 (2). Es una entidad poco frecuente y desde que fue descrita en 1856 hasta 1980 se han reportado alrededor de 1000 pacientes(3) Se señala que representa el 0,17% de las laparatomias exploradoras. (2)La frecuencia mundial es baja por su carácter asintomático y relativamente común. Se ha informado una prevalencia de 2 al 7,81%. En una serie publicada en la Clínica Mayo, Sanfelippo y col analizaron 150 casos de quiste hepáticos de 80000 exploraciones abdominales, desde Enero 1954 hasta Diciembre de 1971 encontrando 82 quistes hepáticos gigantes de los cuales 15 sintomáticos, con una incidencia cerca de 17 casos por cada 10.000 laparotomías, serie que refleja lo encontrado por Henson y col (1907 a 1953) quienes reportaron 77 quistes hepáticos siendo 38 solitarios con incidencia similar a la serie de Sanfelippo. En Noviembre de 1990 hasta Noviembre de 1992 en la Clínica Quirúrgica de la Universidad de Turín, Italia, se estudiaron 17 pacientes con quiste hepáticos solitarios no parasitarios, 13 en mujeres y 4 hombres con edades entre 36 y 67 años con diámetro entre 9 a 20 cm de diámetro. La enfermedad quistica del hígado es el resultado de malformaciones congénitas, hereditarias o no, donde la lesión básica consiste en quistes macroscopicos o microscópicos (4). Su origen es discutido, multifactorial y existen teorías que afirman que se origina de restos embrionarios, de conductos biliares aberrantes, obstruidos por un proceso congénito o de hipertrofia inflamatoria (1) o bien como malformaciones embrionarias de células epiteliales pluripotenciales derivadas del intestino anterior (5). Otra teoría sustenta su origen en la inclusión de células mesoteliales del peritoneo en el parenquima hepático durante el desarrollo embrionario(1,6). Según Fernández y col (7) la enfermedad es causada por un defecto congénito del desarrollo y se observa que en embriones humano entre los 15 y 20mm existe una producción masiva de conductos biliares mientras el resto del hígado se desarrolla normalmente. (7) El tamaño y localización de los quistes hepáticos es variable, pudiendo afectar uno o ambos lóbulos, siendo mas frecuente en el lóbulo derecho del hígado (5). Los quistes simples contienen liquido seroso y no se comunican con el árbol biliar intrahepatico, los quistes grandes producen atrofia del tejido hepático adyacente.(4) . Al corte el parenquima presenta un aspecto en panal de abeja, la pared es fina con epitelio columnar, cuboide o plano con contenido liquido claro en su interior sin bilis (5). Entre los diagnósticos diferenciales se encuentran los abscesos, quistes hidatídicos (calcificaciones en la pared), enfermedad poliquistica, cistoadenoma, cistoadenocarcinoma, hiperplasia nodular focal.
La baja frecuencia de esta patología motivó la presentación de el presente caso


Quiste hepático gigante. Descripción de un caso
Introducción
Descripción clínica
Discusión
Referencias

NOTA: Toda la información que se brinda en este artículo es de carácter investigativo y con fines académicos y de actualización para estudiantes y profesionales de la salud. En ningún caso es de carácter general ni sustituye el asesoramiento de un médico. Ante cualquier duda que pueda tener sobre su estado de salud, consulte con su médico o especialista.





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