Rol del psicólogo en la Unidad de Coloproctología del Instituto Autónomo Hospital Universitario de Caracas
Rol del psicólogo
Dentro de la organización de la sociedad cada uno de los profesionales desempeña un rol particular, el cual involucra actividades dirigidas a personas o ámbitos específicos, teniendo cada uno de estos profesionales un rol asignado. En este sentido, el rol profesional puede ser entendido como un conjunto de conductas que se espera que realice una persona con determinada formación académica en un área específica en función de la posición que ocupa dentro de la sociedad (González, González y Vicencio, 2014).
Ahora bien, la delimitación de los roles profesionales, va a depender de las características y encargo social que se asigne a cada profesión. En el caso de la Psicología, la valoración social y posicionamiento que ha tenido como disciplina científica y profesión constituye un proceso que se encuentra constantemente cambiando debido a dos factores principales; el primero hace referencia a los cambios que experimenta la sociedad y las problemáticas percibidas por los individuos e instituciones que la conforman y, el segundo, a la efectividad con la que los psicólogos como institución científica y gremio profesional responden a estas demandas (González, González y Vicencio, 2014).
Debido a que la psicología es una profesión que puede ser desempeñada en contextos distintos, que van desde el ámbito académico, social u hospitalario hasta la práctica privada e individual o grupal, el rol como constructo no puede ser definido a priori y de manera inmutable, debido a que va a modificarse en función de las distintas tareas desempeñadas por el psicólogo en el contexto que se desempeñe (González, González y Vicencio, 2014).
Por tal motivo, resulta complejo proporcionar una definición inamovible e invariable del rol profesional del psicólogo en un plano general, sino que se definen múltiples roles específicos asociados a escenarios de desempeños delimitados; pudiendo el psicólogo desempeñar roles de distinta especialización dentro de un mismo contexto institucional.
En tal sentido, se determina que es, a través de la interacción dinámica entre el psicólogo y quienes demandan sus servicios que se van definiendo las funciones que debe cumplir el profesional en determinado contexto (González, González y Vicencio, 2014).
En lo que respecta a la sociedad venezolana, también se evidencia esta realidad en cuanto a la delimitación del rol del psicólogo, debido a cinco implicaciones principales, a saber: - Disparidad existente en los programas de formación académica de pregrado, lo cual permite que los profesionales en formación posean diferencias en cuanto a las competencias pragmáticas y de conocimiento, provocando un desarrollo desigual en la puesta en práctica, a nivel profesional, de dichas competencias.
- Desconocimiento y/o uso predominante de un enfoque output por parte de las instituciones al momento de seleccionar al personal que va a laborar en dicha institución de acuerdo a las funciones que debe cumplir, restando importancia al perfil que el profesional debe poseer.
- Falta de delimitación en torno a los diferentes roles que puede desempeñar el profesional de la psicología en cada una de las especializaciones existentes.
- Desconocimiento por parte de las instituciones acerca de las áreas de especialización de la Psicología y la importancia de reclutar profesionales especialistas en dichas áreas, con el fin de que el desempeño del profesional esté adaptado a los requerimientos del cargo.
- Proliferación de terapias y tratamientos pseudopsicológicos, no fundamentados científicamente, con una base netamente tecnológica, que sustituyen, en muchas ocasiones, a los profesionales interfase en la práctica psicológica (que integran la dimensión teórica con la tecnológica), por la premura con la que aportan soluciones, contribuyendo a la ambigüedad de la percepción social del rol.
En otro orden de ideas, una de las áreas que cuenta con la participación de un equipo interdisciplinario que integra a la psicología, es el ámbito de la salud. En Venezuela, a pesar de que existen programas formativos a nivel postgrado en relación a esta área, no se ha delimitado de forma concreta el rol y/o los requerimientos que debe poseer un profesional para desempeñarse de manera eficiente en el ámbito hospitalario; encontrándose en desventaja en relación al manejo que otorgan los sistemas sanitarios de otros países al rol del psicólogo en el ámbito de la salud.
En miras de generar un abordaje integral y partiendo de la existencia de modelos psicológicos en el ámbito de la salud, se hace perentorio el reconocimiento de lo concerniente a la psicología en términos de interacción con los aspectos biológico y social de los individuos. Resultando necesario hacer converger dichas dimensiones a fin de dar respuestas al proceso salud-enfermedad, tanto a nivel de evaluación, prevención, tratamiento como rehabilitación.
Siendo una de las responsabilidades de la salud pública la integración de las disciplinas que aportan beneficios al abordaje de la población asistente a los diversos centros hospitalarios, tal como es el caso de la psicología y su vinculación con la salud, resulta pertinente que en los profesionales especialistas en estas áreas predomine un enfoque transdisciplinario el cual tiene como norte la integración de saberes para la construcción de un mismo objeto y el manejo de un lenguaje común entre diferentes disciplinas (Lanz, 2010).
Tomando en cuenta lo anteriormente expuesto, resulta necesario comprender que desde un campo de actuación individualizado entre disciplinas, los resultados obtenidos no proporcionaran soluciones satisfactorias e integrales a los problemas de salud que aquejan a amplios sectores de la población, pudiendo revertirse esta realidad en la medida en que se sienten las bases de un verdadero y eficiente quehacer transdisciplinario.
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