La invaginación intestinal es una entidad clínica
frecuente en la infancia pero infrecuente en el adulto.(7,8) Se ha
descrito que es posible la identificación de una causa desencadenante de la
intususcepción en aproximadamente 80 a 90% de los casos, siendo el origen
idiopático poco frecuente.(9) Por lo general es causada por tumores
propios de la pared intestinal y raramente de origen extraluminal.(10-12)
Dependiendo de la localización,
la intususcepción se puede clasificar en: entero-entérica, íleo-cólica,
colo-colónica, colo-rectal y recto-rectal, siendo más frecuentes las
correspondientes al intestino delgado tal como lo reporta Zubaidi y col.(2)
De acuerdo a Goh y col.(13), las invaginaciones íleo-cólicas ocupan
el 25% y las entero-entéricas ocupan el 26,7%, siendo las colo-cólicas y las
sigmoideo-rectales los tipos menos comunes, resultados similares a los
obtenidos por Wang y col. (14)
Los tumores del intestino delgado que producen
intususcepción son generalmente de etiología benigna, donde se incluyen:
lipomas submucosos, leiomiomas, divertículos de Meckel y adherencias, siendo
muy poco frecuente la presencia de tumores malignos, representando estos del 5
al 30 % de todos los tumores, y de estos el más común es el adenocarcinoma.(8,10-12)
La
incidencia de cáncer del intestino delgado es muy baja, aproximándose del 1 al
2% de todas las neoplasias que ocurren en el tracto gastrointestinal. Los tipos
histológicos más frecuentes son: adenocarcinoma con una incidencia de 45,3%,
carcinoide 29,3%, linfoma 14,8% y sarcoma 10% (6,18,19).
Los
sarcomas primarios del tracto gastrointestinal constituyen el 2% de todos los
cánceres de la vía digestiva, siendo las localizaciones más frecuentes: el
estómago (47%), intestino delgado (35%), colon (12%) y esófago (5%). Su
incidencia en intestino delgado es mayor en personas de edad avanzada con una
media de 59,3 años, siendo la localización más frecuente el yeyuno.(20)
Clínicamente se presenta con sintomatología de hemorragia digestiva inferior,
anemia, dolor abdominal y pérdida de peso. Existen pocos casos reportados en la
literatura de intususcepción intestinal por sarcoma.(21)
La tomografía de abdomen ha
incrementado la tasa de diagnóstico preoperatorio en pacientes con
intususcepción, siendo actualmente el estudio que ofrece mayor sensibilidad.
Los hallazgos característicos de la tomografía incluyen el signo del “target” o diana caracterizado por una
masa de tejido blando intraluminal con densidad grasa periférica debido al
mesenterio invaginado y aire atrapado entre el mesenterio de ambos segmentos
intestinales.(5, 7, 12,)
El uso de la Tomografía abdominal con doble
contraste es de utilidad en la identificación de la causa de la invaginación ya
que puede permitir la visualización de alguna masa, su localización, extensión
y el reconocimiento de elementos sospechosos de malignidad.(12, 13, 17)
El tratamiento de elección para
la invaginación es la resección quirúrgica de la lesión con márgenes libres,
siempre y cuando esta sea sintomática o haya sospechas de malignidad.(17)
La realización de la reducción previa de la intususcepción se encuentra
contraindicada debido a la probabilidad de causas de etiología maligna, la cual
en el colon se aproxima al 50 - 60% de los casos y en intestino delgado de 1 a
40%, siendo la mayoría lesiones metastásicas.(2,3,22,23)
El uso de la cirugía mínimamente
invasiva ofrece numerosas ventajas en este tipo de patología, ya que al ser de
difícil diagnóstico permite realizar laparoscopia diagnóstica para corroborar
los hallazgos tomográficos y ecosonográficos, disminuyendo la morbilidad de una
laparotomía negativa.(17,24) Otros
autores, Palanivelu y col. describen una experiencia similar con el uso de
cirugía laparoscópica para la exploración intrabdominal y resección de tumores
poco frecuentes como el sarcoma granulocítico del tracto gastrointestinal, los
cuales se presentan en menor medida en el intestino delgado y, a menudo se manifiestan
con dolor abdominal y obstrucción. (24)
Palanivelu y col. lograron resección asistida
por laparoscopia de la porción afectada del yeyuno como tratamiento definitivo
para la resección del tumor.(24) De esta manera, se propone que el tratamiento
de elección para la intususcepción en el adulto es la resección quirúrgica con
márgenes amplios, siendo el abordaje laparoscópico factible; además de ofrecer
las conocidas ventajas del abordaje mínimamente invasivo en relación con óptimo
efecto estético, menor dolor postoperatorio, menor tiempo de hospitalización y
rápida reincorporación a actividades habituales.