Se diseñó un
estudio descriptivo de corte transversal. Se aplicaron 112 cuestionarios
repartidos de la siguiente manera: 54 a niños obesos (27 antes de la charla y
27 después de la charla educativa) y 58 a padres de niños obesos (29 antes de
la charla y 29 después de la charla educativa), a nivel de la Consulta de
nutrición del Ambulatorio el Concejo de la Universidad de Carabobo.
Se
utilizó un cuestionario inicial elaborado por los investigadores que se pasó a
un grupo reducido de escolares obesos y sus padres, y cuyas respuestas permitieron
ajustar la redacción de las preguntas a los objetivos para cada uno de los
contenidos evaluados. Se emplearon preguntas cerradas, utilizando criterios de
selección: que fueran fáciles de comprender y que contemplaran conocimientos
clave para la formación personal de los escolares y sus padres sobre alimentación.
Al
cuestionario se le aplicó una prueba de confiabilidad de la siguiente manera:
Cuestionario de los Adultos:
El
instrumento estuvo conformado por 39 ítems en escala dicotómica (Correcto,
Incorrecto), por lo que se aplicó la prueba de Kuder Richardson 20 (KR20) que
tiene la siguiente fórmula:
KR20 = (n / n-1)* (1-(suma varianza
ítems / varianza test))
KR20 = (39 / 38) * (1 – (6,41 /
40,11)) = 0,86
Al
sustituir los valores (según anexo), se obtiene que la confiabilidad fue de
0,86 cuyo valor es Bueno y, por lo tanto se puede utilizar el instrumento para
la recolección de la información al grupo de estudio.
Cuestionario de los Niños:
El
cuestionario aplicado a los niños fue idéntico al de los adultos, al aplicar la
fórmula antes descrita, se obtuvo el siguiente resultado:
KR20 = (39 / 38) * (1 – (7,82 /
36,03)) = 0,80
La
confiabilidad fue de 0,80 cuyo valor es Bueno y se puede, por lo tanto,
utilizar el instrumento para la recolección de la información al grupo de
estudio.
El cuestionario final estuvo
estructurado de la siguiente manera:
La
primera parte constó de una lista de 31 alimentos de uso frecuente en
Venezuela, y se les solicitó marcar con una X el contenido más importante de
cada alimento en grasa, proteína, almidón o vitaminas y minerales.
En
la segunda parte se le solicitó marcar con una X si era recomendable o no usar
salero en la mesa, agregado o no de azúcar en los alimentos, y tomar o no
abundante agua.
En
la tercera parte se solicitó marcar con una X la relación entre enfermedades
como la diabetes, obesidad, hipertensión arterial y cálculos renales con la
ingesta en exceso de, azúcar, grasa, sal, almidones y proteína.
Para
la recolección de la información se planificó un encuentro con los niños y sus
padres un día de la semana durante 3 horas distribuidas de la siguiente manera:
En
las dos primeras horas se aplicó el primer cuestionario tanto a los niños como
a sus padres, luego se realizó una charla informativa acerca del contenido
nutricional de los alimentos, así como de los hábitos alimentarios (uso de
salero, agregado de azúcar) y el hábito de tomar agua. Se explicó la relación
entre ciertas enfermedades como la obesidad, diabetes, hipertensión arterial,
cálculos renales y la alimentación. En la tercera hora hubo participación de
los niños y sus padres con preguntas y respuestas, se aplicó nuevamente el
cuestionario tanto a los niños obesos como a sus padres.
Los conocimientos sobre el contenido
nutricional de los alimentos se categorizaron con los siguientes criterios:
100-90 %: conocimiento óptimo; 89-75 %: conocimiento bueno; 74-50 %:
conocimiento regular; 49-0 %: conocimiento deficiente.
Los
datos fueron procesados con el programa Statistix 8.0. Los resultados se
presentan en cuadros y gráficos de distribución de frecuencias y de asociación.
Se realizaron comparaciones de proporciones con la prueba z, asumiendo un nivel
de significancia de p<0,05.