Se realizó un estudio
descriptivo, longitudinal y observacional en pacientes con diagnóstico de
espasticidad secundaria a EVC atendidos de forma ambulatoria en la Clínica de
Espasticidad del Centro Nacional de Rehabilitación “Dr. Alejandro Rhode”
durante el periodo octubre de 2008 a septiembre de 2009. La población la constituyeron
los pacientes atendidos en ese servicio durante el periodo de estudio y la
muestra estuvo formada por 21 pacientes que cumplieron con los criterios de
inclusión y aceptaron participar en el estudio mediante la firma del
consentimiento informado.
Criterios de inclusión: 1)
Pacientes masculinos y femeninos con diagnóstico clínico de espasticidad grado
1 (1 y 1+/4), 2 (2/4) y 3 (3/4), según la escala Ashworth modificada, post-EVC
y mayores de 20 años. 2) Pacientes que nunca hayan recibido tratamiento con
toxina botulínica tipo A. 3) Pacientes con déficit neurológico susceptible de
tratamiento fisiátrico.
La escala de Ashworth modificada
evalúa fundamentalmente el tono muscular, es de tipo cualitativa y permite
clasificar la espasticidad del paciente en grados de 0 a 4: grado 0 (ningún
aumento del tono muscular); grado 1 (ligero aumento del tono muscular,
manifestado por captación y liberación o por resistencia mínima de la gama de
movimiento cuando la(s) parte(s) afectadas se mueven); grado 1+ (ligero aumento
del tono muscular, manifestado por captación seguida de resistencia mínima por
todo el resto del rango de movimiento articular (menos de la mitad); grado 2
(Aumento más notable del tono muscular por la mayor parte del rango de
movimiento articular; pero la(s) parte(s) se mueve(n) con facilidad); grado 3
(Aumento considerable del tono muscular, movimiento pasivo difícil); grado 4
(parte(s) afectada(s) rígida(s) en flexión o extensión).(21)
Este trabajo en su fase de
proyecto fue aprobado por la Coordinación del Postgrado del Hospital Militar
Dr. Carlos Arvelo quien además de los aspectos técnico-científicos evalúo los
aspectos éticos de la investigación. Previa obtención del aval del Centro
Nacional de Rehabilitación “Dr. Alejandro Rhode” para realizar el estudio, se
realizó un interrogatorio a cada paciente y/o representante así como una
evaluación clínica al ser ingresado al estudio y posteriormente al tratamiento
rehabilitador y la aplicación de la toxina botulínica tipo A (al mes y medio y
a los 3 meses). Con la información obtenida se llenó una ficha de control donde
además se recogieron datos de identificación, diagnostico clínico, tipo de EVC,
resultados de la Resonancia Magnética Nuclear cerebral, segmento corporal
afectado, grado de espasticidad, dosis de toxina botulínica tipo A utilizada y
tiempo de inicio de la rehabilitación. A los pacientes se les aplicó la escala
de Medida de Independencia Funcional (FIM) (22-24) al inicio del
tratamiento fisiátrico, al mes y medio y a los 3 meses.
La escala FIM valora la
discapacidad física y motora en términos de carga y cuidados y es utilizada
para monitorear y evaluar el progreso así como los resultados del tratamiento
fisiátrico. Consta de 18 ítems, 13 motores y 5 cognitivos. El nivel de
independencia se clasifica en: Independiente, dependencia modificada y
dependiente.(22-24)
De acuerdo al protocolo de la
institución, los pacientes son ingresados a un programa de rehabilitación al
día siguiente de haber sido evaluados y aplicada la toxina. Este programa
consiste en una sesión diaria de fisioterapia de 45 minutos de duración (10
sesiones diarias consecutivas) y una sesión de terapia ocupacional (10 sesiones
diarias consecutivas de 45 minutos cada una). Los pacientes recibieron previamente
toda la información sobre el estudio, se obtuvo el consentimiento por escrito e
ingresaron de forma ambulatoria.
Se utilizó toxina
botulínica tipo A, aprobada para su uso en Venezuela bajo la autorización del
Instituto Nacional de Higiene “Rafael Rangel”. Su potencia se expresa en
unidades, de tal manera que una unidad es equivalente a la cantidad de toxina
capaz de matar al 50% de un grupo de ratones hembras Swiss-Webster de entre 18
y 20 gramos de peso (DL50). La dosis utilizada en cada paciente con
espasticidad varió según el grupo muscular afectado y de acuerdo a los
criterios internacionales (10,24,25) y a los de la Clínica de
Espasticidad del Centro Nacional de Rehabilitación “Dr. Alejandro Rodhe”.
Esta toxina se
presenta en una preparación liofilizada y secada al frío en forma de ampollas
que deben guardarse congeladas a –5° C y la toxina se reconstituye en el
momento de la inyección intramuscular con 2 ml de solución fisiológica (sin
preservativo).
Para
localizar el punto motor del músculo donde se inoculará la toxina se realizó la
asepsia y antisepsia del lugar y se aplicaron estímulos con el estimulador
motor (Life Tech EZ Stin II). La solución diluida se recogió en una jeringa de
tuberculina y la toxina se inyectó con una aguja de calibre de 27 y de 0,5 pulgadas
de largo en los músculos pequeños y/o superficiales y de calibre 27 con 1,5
pulgadas de largo en los músculos grandes y/o profundos. (10,25,26)
Análisis de datos. Con la
información obtenida se construyó una base de datos con el programa SPSS
versión 14.0. Se realizó un análisis estadístico descriptivo según el tipo de
variable. Se aplicó la prueba de Ji al cuadrado (χ2) para la comparación de variables que así
lo requirieran. Finalmente los resultados fueron expresados en tablas y/o
gráficos según sus frecuencias relativas o valores absolutos según el caso.