Medicina interna
II Consenso Venezolano sobre Enfermedad Tromboembólica (II): Patología Venosa
Profilaxis
En los pacientes hospitalizados o encamados, en riesgo de ETV, están indicados los cuidados generales, tales como, deambulación precoz, hidratación adecuada, compresión de los gemelares y evitar la inmovilidad realizando cambios de posición frecuentes (cada 2 - 3 horas). (R: I; NE: B)1-2
La profilaxis de la ETV se basa en dos pilares fundamentales: las medidas mecánicas y las farmacológicas.
1.1.- Métodos mecánicos La base fisiopatológica de estos métodos es el aumento del flujo y la minimización del estasis venoso de los miembros inferiores. Los instrumentos útiles son medias de compresión graduada y dispositivos de compresión neumática intermitente, los cuales disminuyen la frecuencia de TVP, aunque no del EP. (R: I; NE: A). En comparación con las medidas farmacológicas, no producen mejores resultados.3-4-5-6-7-8-9
Deben aplicarse medidas mecánicas a pacientes en quienes la anticoagulación esté contraindicada. (R: I; NE: C)
Es útil la profilaxis con métodos mecánicos en pacientes críticos con alto riesgo de sangrado, la cual debe mantenerse hasta que disminuya este riesgo. (R: I; NE: C) 5-9-10-11-12
1.2.-Métodos Farmacológicos
En profilaxis venosa se utilizan anticoagulantes, los cuales inhiben la formación de fibrina en la cascada de coagulación. La disponibilidad de fármacos es grande, pero en este documento se mencionan aquellos que han demostrado utilidad en la patología venosa y están disponibles en el país. Estos son:
- Heparina no fraccionada (HNF) 13
- Heparinas de bajo peso molecular (HBPM): enoxaparina, fraxiparina, dalteparina y nadroparina 14-15-16-17-18
- Antagonistas de la vitamina K: warfarina19
- Pentasacáridos sintéticos: fondaparinux20
- Inhibidores directos de la trombina: ximelagatran 21
Las medidas farmacológicas serán analizadas según los factores de riesgo, considerando que la mayoría de los pacientes hospitalizados cursa con más de un factor; especialmente, aquellos con patología médica crónica, quienes además pueden ser sometidos a procedimientos quirúrgicos que aumenten su riesgo.
En nuestro país, la larga estancia hospitalaria, en especial en pacientes con patología quirúrgica, ortopédica y oncológica, debe considerarse un agravante que requiere minimizarse, pues incrementa el riesgo de TVP innecesariamente. Una mención especial merecen los individuos que realizan viajes de más de 6 horas. Según recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS) estos deben evitar ropa que comprima la cintura y los miembros inferiores, deben movilizarse con frecuencia (caminar cada hora), comprimir periódicamente los músculos gemelares, aumentar el consumo de líquido y evitar el consumo de café y alcohol. (R: I; NE: C). En pacientes con riesgo conocido de TVP podría considerarse el uso de medias antiembólicas (R: IIb; NE: B) y/o la utilización de HNF o HBPM en dosis únicas previas al viaje. (R: IIa; NE: C)25-26-27 |