Expansión del tratamiento antirretrovial en entornos de recursos limitados
Recomendaciones para tratamiento antirretroviral de primera línea
Recomendaciones para tratamiento antirretroviral de primera línea en
adultos y adolescentes
Se motiva a los países
para que empleen un enfoque de salud pública para aumentar y masificar
el uso del tratamiento antirretroviral en entornos de recursos limitados, tal
como lo establece la estrategia de la OMS “3 millones para el 2005”. De esta
manera se deben desarrollar los programas de tratamiento antirretroviral que
puedan estar a disposición de la mayor cantidad de gente que los requieran,
a la medida de lo posible, y es necesario que el tratamiento antirretroviral
esté estandarizado. Se sugiere especialmente que los países deben
elegir un tratamiento de primera línea y un número limitado de
tratamientos de segunda línea, tomando en cuenta que se tendría
que referir a tratamiento individual con especialistas médicos a los
pacientes que no toleren o cumplan con los tratamientos de primera o segunda
elección. El uso de tratamientos estandarizados constituye un componente
esencial del plan “3 millones para el 2005” y facilitará los esfuerzos
de la OMS para asistir a los países miembros en el logro de este objetivo.
Este es el enfoque que establece la selección de la terapia antirretroviral
de este documento.
Las consideraciones
para la selección del tratamiento antirretroviral, tanto a nivel del
programa, como a nivel de cada paciente, deben incluir la potencia, el perfil
de los efectos colaterales, los requerimientos de laboratorio para el seguimiento,
el potencial para el mantenimiento de opciones de tratamientos futuros, el anticipado
cumplimiento del tratamiento por parte del paciente, las afecciones coexistentes
(por ejemplo coinfecciones, anormalidades metabólicas), embarazo o el
riesgo del mismo, el uso de medicamentos concomitantes (es decir, potenciales
interacciones de fármacos), el potencial de infección con una
cepa de virus que presente una susceptibilidad disminuida a uno o más
tratamientos antirretrovirales, producto de una exposición previa a los
antirretrovirales, ya sea profilaxia o el propio tratamiento, y de manera muy
importante, la disponibilidad y costo.
El uso de
antirretrovirales de calidad garantizada § en combinaciones de dosis fija
# (CDF) o en empaques burbuja ¶ (coblister pack, según
su denominación en inglés) es otra importante consideración
ya que se propicia un mayor cumplimiento del tratamiento y éste puede,
a su vez, limitar la aparición de resistencia al fármaco. Este
uso también facilita el almacenamiento de los medicamentos antirretrovirales
y su logística de de distribución. Consideraciones adicionales
relevantes en países en desarrollo incluyen el acceso a un número
limitado de fármacos antirretrovirales, infraestructura médico
asistencial limitada que incluya personal de recursos humanos, la necesidad
de llevar fármacos a áreas rurales, una alta incidencia de tuberculosis
y hepatitis B y/o C en la población, y la presencia de diversos tipos,
grupos o subtipos de virus de VIH.
En la versión
previa de estas pautas de tratamiento (abril de 2002) la OMS recomendó
que los países deben seleccionar un tratamiento de primera línea,
e idenfificó los tratamientos compuestos por dos nucleósidos y
un no nucleósido, ya sea abacavir, o un inhibidor de proteasa. Desde
que se publicaron las directrices de abril de 2002, muchos países han
iniciado los programas de tratamiento antirretroviral, y han elegido su tratamiento
de primera línea tomando en cuenta si los factores anteriormente mencionados
se aplican en su entorno específico. Se ha optado en la mayoría
de los programas de tratamiento en países en desarrollo por un regimen
compuesto por dos nucleósidos y un no nucleósido inhibidor de
proteasa.
Tratamientos de nucleósidos
triples que incluyen abacavir (ABC) no fueron casi nunca seleccionados debido
a su costo y a la preocupación por reacciones de hipersensibilidad, y
tratamientos que incluyen un inhibidor de proteasa se tornaron la segunda opción,
principalmente debido a su costo, a pesar de que han disminuido de precio. Se
consideró también el uso de una gran cantidad de píldoras
a pesar del perfil de sus efectos secundarios y su difícil logística
que requiere en ocasiones mantener los fármacos bajo cierta temperatura.
Durante la revisión
de tratamientos basados en no nucleósidos, el comité de redacción
que esbozó estas directrices consideró, tomando en cuenta la experiencia
clínica de la eficacia y toxicidad de los componentes NRTI y NNRTI, la
disponibilidad de combinaciones de dosis fija (Ver Apéndice D), el hecho
de que no se requiera refrigerar los fármacos, la disponibilidad del
fármaco y su costo, y concluyó que los cuatro regímenes
que aparecen en la Tabla B son apropiados para tratamientos antirretrovirales
de primera línea en adultos y adolescentes. Estos regímenes consisten
en un NRTI [estaduvina (d4T) o zidovudina (ZDV)], un NRTI de tiacitidina [lamivudina
(3TC)] y un NNRTI [nevirapina (NVP) o efavirenz (EFV)].
La elección
entre la estaduvina (d4T) y la zidovudina (ZDV) se debe tomar de acuerdo a cada
país tomando como base consideraciones locales, aunque se debe recomendar
tener ambos fármacos disponibles. En primer lugar se tolera mejor la
d4T y no requiere que se realice un seguimiento de la hemoglobina. No obstante,
en países desarrollados, entre los NRTI, se ha asociado a la d4T consistentemente
con lipoatrofia y otras anormalidades metabólicas que incluyen acidosis
láctica, particularmente cuando se combina con didanosina (ddI). También
puede causar neuropatía periférica y pancreatitis. Se ha implicado
a la ZDV en complicaciones metabólicas de la terapia, y en una menor
medida a la d4T. Efectos colaterales en la fase inicial del tratamiento son
frecuentes con ZDV (cefalea, naúseas) y el fármaco puede provocar
anemia severa y neutropenia, lo que requiere, al menos, estabilizar el nivel
de hemoglobina antes de y durante el tratamiento con ZDV. La estaduvina (d4T)
puede ser reemplazada por zidovudina (ZDV) cuando se presenta intolerancia,
o al contrario, reemplazar ZDV por d4T, excepto en casos en que se sospeche
acidosis láctica en los que ninguno de estos fármacos debe ser
prescrito. Sin embargo, la necesidad inicial de un seguimiento menos exhaustivo
de laboratorio puede contribuir con la elección de d4T como el nucleósido
para la mayoría de los pacientes en programas antirretrovirales en entornos
con limitaciones severas de recursos que tienen como objetivo aumentar y masificar
la terapia rápidamente.
La lamiduvina
(3TC) es un potente NRTI con un excelente registro de eficacia, seguridad y
tolerancia. Se puede tomar una o dos veces al día y ha sido incorporada
en varias combinaciones de dosis fija. La emtricitabina (FTC) es un análogo
de nucleósido recientemente aprobado y está estructuralmente relacionado
a la lamiduvina (3TC), comparte su perfil de resistencia, y se puede administrar
una vez al día 10 . Actualmente se realizan estudios donde
la consideran como un producto coformulado con fumarato disoproxil tenofovir
(TDF). Debido a la relativamente reciente aprobación de FTC en un limitado
número de países, éste no se incluye en las recomendaciones
de tratamientos de primera línea de la OMS; de acuerdo a futuras experiencias
con el fármaco, su disponibilidad y costo, esta situación podría
cambiar.
El componente
de los dos nucleósidos d4T/ddI ya no se recomienda como parte de tratamientos
de primera línea debido a su perfil de toxicidad, particularmente en
mujeres embarazadas 11 . Cabe enfatizar que no se deben usar juntos
los fármacos ZDV y d4T ya que se ha comprobado el antagonismo entre ellos
12 .
El fumarato
disoproxil tenofovir (TDF) tiene una larga vida media intracelular y por tanto
puede ser usado como parte de tratamientos compuestos por tres fármacos
con administración una vez al día. Se ha observado que TDF es
un efectivo componente de tratamientos de primera línea en combinación
con lamiduvina (3TC) y efavirenz (EFV) 13,14 . Generalmente se tolera
bien el TDF a pesar de algunos informes de aparición de insuficiencia
renal en pacientes que lo han recibido 15-17 . No obstante, la experiencia
a nivel mundial con este fármaco es aún relativamente limitada.
Además, aun existe el problema en países en desarrollo de su limitada
disponibilidad y su relativamente alto costo. En consecuencia, en lo que respecta
al propósito de estas directrices, la discusión de su uso quedará
restringida a terapias de segunda línea. A medida que aumenta la experiencia
con el uso de TDF, la disponibilidad y los problemas de costo en entornos de
recursos limitados se esclarezcan, se podría considerar la inclusión
de TDF en los tratamientos de primera línea recomendados por la OMS.
Tratamientos
basados en NNRTI son actualmente las combinaciones más comúnmente
prescritas para la terapia inicial a nivel mundial. Son potentes y relativamente
sencillos pero son inactivos contra el VIH-2 y el grupo O de VIH-1. El efavirenz
(EFV) y la nevirapina (NVP) son ambos potentes NNRTI con eficacia clínica
comprobada cuando son administrados en los tratamientos de combinación
apropiados. Sin embargo, las diferencias en los perfiles de toxicidad, el potencial
de interactuar con otros tratamientos, y el costo, conducen a la formulación
de recomendaciones positivas y negativas para su uso 13,18-24 . NVP
tiene una alta incidencia de erupción cutánea que puede ser severa
y un alto riesgo de hepatotoxicidad que pueden poner en peligro la vida del
paciente. Por lo tanto, NVP se torna menos indicado para tratar pacientes que
utilizan otros medicamentos hepatotóxicos, o que produzcan erupción
cutánea, o ambos, como la rifampicina.
Los principales efectos
tóxicos asociados a EFV están relacionados con el sistema nerviosos
central, teratogénesis y erupción cutánea; este último
signo es más frecuente en niños que en adultos, es leve, y generalmente
no requiere que se detenga/abandone el tratamiento. Los síntomas del
sistema nervioso central típicamente declinan luego de 10 a 14 días
a lo máximo, pero no en todos los pacientes. Se debe evitar EFV en pacientes
con historia de enfermedad psiquiátrica severa y cuando se pueda presentar
embarazo o durante el embarazo. Se debe considerar EFV como la elección
de NNRTI para pacientes con tuberculosis y NVP debe ser la mejor opción
para mujeres en edad fértil o que estén embarazadas. No se le
debe administrar EFV a mujeres en edad fértil, a menos que se garantice
el uso de anticonceptivos orales efectivos. Sin embargo, es importante resaltar
que EFV podría interactuar con métodos contraceptivos orales.
Se dispone de NVP
como parte de una combinación de dosis fija de tres medicamentos y puede
ser utilizado cuando formulaciones de calidad garantizada y de bioequivalencia
comprobada estén disponibles. El uso del enfoque del “formulario” de
5 medicamentos (d4T o ZDV) + 3TC + (NVP o EFV) aquí expuesto, se traduce
prácticamente en cuatro posibles tratamientos (Tabla B) y ofrece las
opciones para sustituir un medicamento en caso de que presente toxicidad (Tabla
C). Se considera que cada uno de estos tratamientos es apropiadamente potente
y todos cumplen con la eficacia de los regímenes estandarizados de tratamiento,
por lo tanto la elección de un régimen como principal tratamiento
por parte de un país debe estar determinada por otros factores. En la
Tabla B se presentan algunos de los factores que deben ser tomados en cuenta
para la elección del tratamiento principal.
Los antirretrovirales
en combinaciones de dosis fija o en paquetes de ampollas poseen ventaja con
respecto a los empaques convencionales de medicamentos: son herramientas útiles
que simplifican el tratamiento y promueven la adhesión al mismo. Además,
este tipo de presentación de medicamentos disminuye al mínimo
errores de prescripción, mejora la adhesión de los trabajadores
de salud pública a los estándares de tratamiento, reduce los errores
de administración, y mejora el manejo de los medicamentos, también,
debido a un menor número de ítems y a una fecha de vencimiento
única, simplifican los planes de compra, adquisición, distribución
y almacenamiento de los medicamentos, ya que se necesita un menor número
de ítems y en volúmenes menores, y reduce el riesgo de un uso
inapropiado de los medicamentos simples. Las combinaciones de dosis fija presentan
un problema cuando se trata de dosis individualizadas, el tratamiento de niños
y la media vida diferencial de los medicamentos cuando se interrumpe el tratamiento.
En el momento de elección también se deben tomar en cuenta los
requerimientos de seguimiento mediante pruebas de laboratorio (Vea Sección
VI).
Cuando se
elige como tratamiento de primera línea al régimen d4T/3TC/NVP
o al régimen ZDV/3TC/NVP, también es importante considerar la
disponibilidad de la combinación de los dos fármacos (d4T/3TC
o ZDV/3TC) para el uso de dosis iniciales de neviparina (NVP) durante las dos
primeras semanas de tratamiento y para tratar la toxicidad asociada con NVP
(Vea Apéndice D). Se debe disponer de otros fármacos a nivel de
hospitales de distrito (nivel 2) y de región (nivel 3). Este enfoque
escalonado de la disponibilidad del tratamiento antirretroviral que se basa
en tres fármacos se puede comparar a la estrategia de seguimiento del
sistema escalonado de salud (Vea Sección VI).
Régimen
antirretroviral
|
Principales
toxicidades posibles |
Uso
en mujeres en edad fértil o embarazadas |
Uso
con infección concomitante de tuberculosis (1) |
Disponibilidad
como combinación de dosis fija de tres fármacos |
Requerimientos
para el seguimiento de laboratorio |
Precio
en países desarrollados para junio 2003 (US$/año) (4)
|
d4T/3TC/NVP
|
Neuropatía,
pancreatitis y lipoatrofia relacionados con d4T.
Hepatotoxicidad
y erupción severa relacionadas con NVP.
|
Sí
|
Sí,
durante fases no iniciales del tratamiento de la tuberculosis, que no
incluyan rifampicina.
Usar cautelosamente
en tratamientos basados en rifampicina (1) |
Sí
|
No
|
281-358
|
ZDV/3TC/NVP
|
Intolerancia
gastrointestinal, anemia y eutropenia,
relacionadas con ZDV.
Hepatotoxicidad
y erupción severa relacionadas con NVP. |
Sí
|
Sí,
durante fases no iniciales del tratamiento de la tuberculosis, que no
incluyan rifampicina.
Usar cautelosamente
en tratamientos basados en rifampicina (1) |
Sí
(3) |
Sí
|
383-418
|
d4T/3TC/EFV
|
Neuropatía,
pancreatitis y lipoatrofia relacionados con d4T.
Toxicidad del SNC
y posible teratogénesis relacionadas con EFV. |
No
(2) |
Sí,
aunque no se debe administrar EFV a mujeres embarazadas o en edad fértil,
a menos de que se garantice una contracepción efectiva. |
No.
EFV no disponble en combinaciones de dosis fija. No obstante, existe
una disponibilidad parcial para ZDV y 3TC (3) . |
No
|
350-1.086
|
ZDV/3TC/EFV
|
Intolerancia
gastrointestinal, anemia y eutropenia,
relacionadas con ZDV.
Toxicidad del SNC
y posible teratogénesis relacionadas con EFV.
|
No
(2) |
Sí,
aunque no se debe administrar EFV a mujeres embarazadas o en edad fértil,
a menos de que se garantice una contracepción efectiva. |
No.
EFV no disponible en combinaciones de dosis fija. No obstante, existe
una disponibilidad parcial para ZDV y 3TC. |
Sí
|
611-986
|
Tabla
B
Regímenes antirretrovirales de primera línea
para adultos y adolescentes y consideraciones para la elección
de tratamiento
(1)
Ver Sección VIII.C (Enfermos de tuberculosis con infección
concomitante por VIH).
(2) Ver
Sección VIII.A (Mujeres en edad fértil o embarazadas).
(3) Estas
combinaciones no han sido evaluadas por la OMS, pero pueden ser empleadas
si se encuentran disponibles formulaciones de calidad garantizada
y bioequivalencia comprobada.
(4) Fuente:
Sources and prices of selected medicines and diagnostics for people
living with HIV/AIDS, June 2003 (www.who.int/HIV_AIDS)
__________________________________
|
Consideraciones
adicionales para la terapia de primera línea que incluye el tratamiento
de HIV-2 e infecciones HIV-1 del Grupo O
Tratamientos
basados en Inhibidores de Proteasa (IP)
Si bien los regímenes basados en inhibidores de proteasa son
aceptados como parte de los estándares de tratamientos iniciales, su
alto costo con respecto a los regímenes basados en NNRTI hace difícil
su uso en países de recursos limitados que buscan aumentar y masificar
esta terapia. Las ventajas de los tratamientos que se basan en inhibidores de
proteasa (por ejemplo, un inhibidor de proteasa y dos NRTI) son su eficacia
clínica comprobada y una completa descripción de su toxicidad.
Como desventajas, se deben contar un gran número de pastillas, en algunos
casos requisitos de agua y alimento, interacciones significativas con otros
fármacos (que excluyen o complican su uso conjunto con tratamientos para
la tuberculosis que emplean rifampicina), anormalidades metabólicas,
la necesidad de mantener bajo refrigeración los regímenes estimulados
por ritonavir, y el hecho de no disponer de coformulaciones con NRTI. Por lo
tanto, en estas pautas, los tratamientos basados en inhibidores de proteasa
se reservan para la terapia de segunda línea (Vea Sección VII).
Sin embargo,
deben ser también considerados como terapias de primera línea
en casos donde exista la preocupación por presencia de resistencia de
NNRTI (por ejemplo , prevalencia en la comunidad de >5-10%) 25,
tipos virales con insensibilidad conocida hacia los NNRTI (por ejemplo, grupo
O de HIV-2 o HIV-1) o intolerancia de agentes de la clase NNRTI. Las consideraciones
incluyen (d4T o ZDV) + 3TC combinados ya sea con lopinavir/ritonavir (LPV/r),
saquinavir/ritonavir (SQV/r), indinavir/ritonavir (IDV/r), o nelfinavir (NFV)
según la o las opciones establecidas por las prioridades de los programas
nacionales. Los inhibidores de proteasa estimulados por ritonavir han obtenido
preferencia debido a su alta potencia 26 y a que implican relativamente
pocos problemas con respecto al número de píldoras; sin embargo,
en muchos países con escasos recursos el hecho de que requieran mantenerse
en temperaturas determinadas y el frecuente seguimiento de laboratorio plantean
problemas. Se puede administrar lopinavir/ritonavir (LPV/r) dos veces al día
y se tolera relativamente bien, pero produce frecuentemente una aumento de los
niveles de lípidos en el plasma. Se puede administrar saquinavir/ritonavir
(SQV/r) una vez al día, se sabe que alcanza niveles adecuados de sangre
durante el embarazo, y es compatible con la administración paralela de
rifampicina. No obstante, existe una fuerte carga en lo que respecta al número
de píldoras en las formulaciones que se encuentran disponibles actualmente
y los efectos colaterales gastrointestinales son frecuentes.
Por otra
parte, a pesar de que nelfinavir (NFV) es considerado menos potente que lopinavir/ritonavir
(SQV/r), resulta una alternativa aceptable, ha sido utilizado de manera extensiva
durante el embarazo y no requiere instalaciones para mantener el fármaco
bajo refrigeración. No obstante, nelfinavir es menos efectivo que otros
inhibidores de la proteasa contra la infección de VIH-2 36
. Se puede considerar también a indinavir/ritonavir (IDV/r) como una
alternativa aunque se le asocie a incidencia moderada de efectos renales adversos,
particularmente nefrolitiasis, y que requiera hidratación intensa hidratación.
El papel
del recientemente aprobado inhibidor de proteasa, atazanavir (ATV), en entornos
de recursos limitados es actualmente incierto. Este fármaco posee la
ventaja de una administración diaria y no induce hiperlipidemia cuando
se administra conjuntamente con ritonavir mejorado. Puede administrarse incluso
con bajas dosis de ritonavir para aumentar su potencia 27,29 . Es
una alternativa razonable, aunque se conozca más, como producto de la
experiencia, de los otros inhibidores de proteasa anteriormente mencionados.
A medida que el costo, el trabajo y la disponibilidad de atazanavir (ATV) mejoren,
se podrán realizar recomendaciones más certeras.
Tratamientos
basados en Tres NRTI (NRTI)
En la edición de 2002 de estas directrices, se consideró
el regimen ZDV/3TC/abacavir (ABC) como el más “amigable con el usuario”
desde el punto de vista del paciente y del programa. Se administran dos píldoras
diarias sin interacción significativa de los fármacos. La principal
desventaja fue la incertidumbre acerca de su potencia ante la presencia de altas
cargas virales en pacientes con enfermedad en estadíos avanzados, incertidumbre
que los fármacos, en especial ABC, estarían disponibles en un
precio asequible y el potencial de reacciones fatales de hipersensibilidad al
ABC.
Datos recientemente
publicados en el Estudio A5095 del Grupo de Ensayos Clínicos de SIDA
(AIDS Clinical Trials Group, según su denominación en
inglés) demuestran que el tratamiento de zidovudina (ZDV), lamiduvina
(3TC) y abacavir (ABC) tiene una tasa de falla virológica significativamente
más alta que cualquiera de los otros dos tratamientos del estudio, 21%
y 10% respectivamente con un seguimiento promedio de 32 semanas 30.
Los otros dos tratamientos del estudio fueron ZDV/3TC/efavirenz o ZDV/3TC/ABC/EFV.
Es importante resaltar que se observaron diferencias significativas en la respuesta
virológica en pacientes con cargas virales superiores y menores a 100.000
copias de ARN VIH/ml. Fue un estudio ciego con respecto a los otros dos tratamientos
que contenían efavirenz (EFV). Se plantea un reto al incorporar estos
hallazgos a la práctica clínica y a la política de procedimientos
debido a las ventajas observadas en el régimen de tres nucleósidos,
en particular el atractivo que supone su uso en el caso de presentarse también
infección de tuberculosis.
Es importante
notar que se puede comparar la eficacia del tratamiento ZDV/3TC/ABC del estudio
A5095 con ensayos previos del mismo tratamiento con pacientes que no han recibido
tratamiento anteriormente 85,86. De igual manera, se pueden comparar
la respuesta de las células CD4 al tratamiento ZDV/3TC/ABC y del tratamiento
de efavirenz (EFV). Por tanto, la inferioridad virológica de tratamiento
ZDV/3TC/ABC con respecto a los tratamientos basados en EFV coloca esta combinación
triple de nucleósidos en un nivel de consideración más
bajo aunque no se descarta considerarlo seriamente como opción de tratamiento.
Podría resultar útil, por ejemplo, cuando no se puede emplear
NNRTI debido a intolerancia o resistencia farmacológica o cuando tratamientos
a base de inhibidores de proteasa no se encuentren disponibles.
Particularmente,
este tratamiento es una alternativa viable para pacientes que presenten también
tuberculosis, cuando se administre al mismo tiempo terapia antirretroviral y
terapia para la tuberculosis. De acuerdo con el propósito de estas directrices,
se considera al tratamiento de 3 nucleósidos, ZDV/3TC/ABC, como una segunda
opción para la terapia inicial en situaciones específicas, por
ejemplo, infección activa y simultánea de tuberculosis e infección
de VIH-2. También es importante resaltar que el ensayo DART en curso,
en el tratamiento de 3000 pacientes que nunca han recibido tratamiento antirretroviral
en África, proveerá información adicional crucial en materia
de la eficacia del tratamiento ZDV/3TC/ABC, con respecto de los tratamientos
ZDV/3TC/TDF y ZDV/3TC/NVP 84 .
No se debe
asumir que todos los tratamientos de 3 NRTI son equiparables, cada combinación
triple de NRTI debe ser considerada individualmente. Este aspecto se puede ilustrar
mediante el estudio recientemente publicado de la combinación de tenofovir
(TDF), lamiduvina (3TC) y abacavir (ABC) que se administró una vez al
día y que presentó una alta tasa de falla virológica (49%)
y una alta incidencia de mutación K65R; esta mutación le otorga
resistencia cruzada a los análogos de nucleósido, excepto en el
caso de zidovudina (ZDV) 31 . De acuerdo con estos datos, se debe
evitar esta combinación en específico. De manera similar, en un
estudio piloto de 24 pacientes, la combinación tenofovir (TDF), didanosina
(ddI) y lamiduvina (3TC) administrada una vez al día produjo una tasa
de falla virológica de 91% y una alta incidencia de mutación K65R
32 . Otro estudio reciente arrojó como resultados una baja eficacia
y alta frecuencia de reacciones adversas con el tratamiento estaduvina (d4T),
didanosina (ddI) y abacavir (ABC) 33 . Por tanto, debe evitarse el
uso de estas combinaciones.
_______________________________
§ Los
medicamentos reunidos en las combinaciones de dosis fija, dentro del
contexto de este documento, incluyen productos individuales que han
sido creados para cumplir o superar los estándares internacionales de
calidad, seguridad y eficacia. En el caso de combinaciones de fármacos
cuyos componentes provienen de diferentes laboratorios, los estándares
internacionales requieren estudios de bioequivalencia clínica para
determinar que estos componentes pueden intercambiarse. Más información
sobre la precalificación de antirretrovirales de la OMS en la página de
Internet:
http://www.who.int/medicines/organization/qsm/activities/pilotproc/proc.shtml
# Las combinaciones de dosis fija se basan en el principio
de incluir dos o más productos farmacológicamente activos en la
misma píldora, cápsula, comprimido o solución.
¶ Los empaques burbuja (coblister pack, según
su denominación en inglés) son un grupo de dos o más píldoras,
cápsulas o comprimidos que se incluyen en un mismo empaque de plástico
o aluminio. |