Con
crecimiento prostático benigno solamente (HPB) 756 casos de 1.500 casos
estudiados que representa un porcentaje de 50.04%. Con crecimiento prostático
benigno acompañado de prostatitis 1.250 casos de 1.500 casos estudiados que
representa un porcentaje del 83.33%. Lo cual refleja lo habitual de ésta
combinación en la practica clínica diaria. Con
crecimiento prostático benigno acompañado de prostatitis y además de cáncer
prostático 496 casos de 1.500 casos estudiados que representa un porcentaje de
33.06%. Lo vemos con inusitada frecuencia en los informes de anatomía
patológica donde aparecen siempre dos patologías que son la prostatitis y el
crecimiento prostático benigno y en un tercio de los casos se acompaña de
cáncer prostático. Con sindrome
de prostatitis solamente 1.000 casos de 1.500 casos estudiados que representa
un porcentaje de 66.66%. Esto se compagina con la frecuencia elevada de casos
de prostatitis en hombres por arriba de 45 años donde 1 de cada 2 hombres puede
presentar episodios inflamatorios prostáticos. Con cáncer
prostático solamente 500 casos de 1.500 casos estudiados lo que representa un
porcentaje del 33.33%. En la tabla 3 (abajo) veremos las características o patrones ecográficos de los casos
particularmente que tuvieron cancer prostático en la muestra estudiada.
De los 1.500
casos, 500 fueron "˜solo cáncer prostático"™, con las siguientes caracteristicas
ecográficas: cáncer prostático hipoecoico 298 de los 500 casos para un 59.6%;
cancer prostático isoecoico 107 de 500 con un porcentaje de 21.4% y cancer
prostático hiperecoico o ecogenico 95 de 500 para un 19%.
Tabla 3. Variedades ecográficas de cáncer prostático.
Del cáncer
prostático con características ecográficas isoecoicas 107/500 (21.4%), que significa
que tiene el mismo patron ecográfico que el resto del tejido circundante y por
lo tanto es practicamente imposible "˜ver"™ una lesion determinada y ser objeto
de biopsia dirigida ecográficamente, en éstos casos se llegó al diagnóstico
debido a que 78/107 (72.89%) tenían abultamiento capsular, o patrones de McNeal
difusos, es decir, las zonas anatomotopográficas no se veían claramente sino
que los bordes de cada área eran difusos, borrosos, no claros y las biopsias
fueron aleatorias y no dirigidas, pero de manera interesante 29 pacientes
(29/107) (27.10%) el diagnóstico ecográfico y clínico al tacto prostático se
hacía practicamente imposible, ya que ni se veian lesiones ecográficas
concluyentes ni se palpaba absolutamente nada anormal al tacto prostático y en
ellos se llegó al diagnóstico de cancer prostático, gracias a los índices
oncológicos ecográficos alterados (densidad del antígeno prostático específico:
PSAd y la densidad del antígeno prostático en la zona de transición: PSAdZT)
que se hicieron con la ayuda de la ecosonografía, lo que consideramos un aporte
importante de éste trabajo de investigación. Al estar
alterados el PSAd y el PSAdZT condujo a que se hicieran biopsias aleatorias
prostáticas en las areas de mayor incidencia de cáncer prostático, como son las
áreas más externas de la zona de transición y la zona periférica, a nivel
basal, medio y apical, consiguiendo el diagnóstico histológico de cáncer
prostático y con ello llevarlos a tratamiento definitivo. Estos índices
oncológicos ecográficos no son de común realización, es decir, no se hacen
rutinariamente, por lo cual luego de éstos hallazgos se concluye que son de
indicación clara y contundente para llegar rapidamente al diagnóstico de cáncer
prostático en aquellos casos dudosos, donde ni el tacto, ni la ecosonografía
aportan datos positivos para pensar en cáncer prostático. Estos son
pacientes que si no se hubieran diagnosticado por medio de dichos índices, no
se hubiera llegado al diagnóstico de manera rápida, y con ello se podría empeorar
el pronóstico a corto, mediano y largo plazo. En el modelo
o plantilla de estudio ecográfico prostático endorectal que aportamos en éste
trabajo lo veremos al final del mismo, y en dicha plantilla se colocaron todos
los datos importantes que debemos precisar en un paciente sometido a
ecosonografia endorectal prostática. Son dos
páginas de información que sustenta mucho mejor la decisión diagnóstica a tomar
y nos dá más confiabilidad diagnóstica y terapéutica. En la practica diaria en
los centros que se hacen éstos estudios, no se aportan ni la tercera parte de
lo datos obtenidos en nuestra sistemática de estudio. Es por ésto que creemos
que éste modelo de estudio será un aporte valioso y útil para los imageneólogos
(radiólogos, ecografistas) y para los urólogos que practican éstos estudios. La creencia
de que la utilidad de la ecografía prostática endorectal era basicamente para
dirigir las biopsias prostáticas a un sitio preciso de anormalidad ultrasónica,
se hizo obsoleta en virtud de la precocidad del diagnóstico clínico de cáncer
prostático, por contar con el antígeno prostático específico (PSA) total y con
el porcentaje de PSA libre o relación PSA libre/total, que se adelanta
aproximadamente 6 años a la detección digital del cáncer y al hecho evidente
que las lesiones hipoecoicas características de cáncer prostático, son cada vez
mas infrecuentes en la practica diaria, asi como tener pacientes con nodulos
cancerosos al tacto se ha hecho tambien infrecuente y usualmente los canceres
en etapas incipientes son raros verlos en la ecosonografía endorectal
prostática, por lo cual se hace imprescindible recurrir a todo el conocimiento
posible de las areas ecográficas de McNeal, asi como de todos los argumentos
que tengamos a mano para pesquisar un cáncer prostático significativo,
recurriendo a signos ecográficos indirectos y a la determinación de los
marcadores tumorales ecográficos de cáncer prostático como son la densidad del
antígeno prostático (PSAd) o la densidad del antígeno prostático en la zona de
transición (PSAdZT). Debemos decir
que en la práctica diaria es comun tener varias patologías prostáticas al mismo
tiempo. Las más frecuentes son el crecimiento prostático benigno con el
sindrome de prostatitis, sin embargo en ocasiones coexisten las tres patologías
prostáticas, en unión al cáncer prostático.
En el
presente trabajo de investigación el hallazgo mas frecuente encontrado fué el
crecimiento prostático benigno más prostatitis con un 83.33%, seguido de cerca
por la prostatitis solo con un 66.66%, el crecimiento prostatico benigno solo
con un 50.04% y en menor cantidad el cáncer prostático sólo con un 33.33%. Cuando el
cáncer prostático es de bajo volumen, usualmente es isoecoico. El carcinoma
intraductal, tiene una apariencia ecográfica triangular y se disemina a lo
largo de los conductos, los cuales están en la zona periférica y en la zona
central de McNeal, ambas zonas, en la periferia de la glándula prostática
(glándula externa). Se localiza en el extremo distal de la uretra prostática y
se insinúa hacia la zona del verumontanum, dando con ésto, una apariencia
triangular hipoecoica característica. Debemos
indicar que no sólo el cáncer prostático produce imágenes hipoecoicas. Así
vemos que el crecimiento prostático quístico-nodular podría tener áreas hipoecoicas
que no son cáncer; el tejido prostático atrofico causará zonas hipoecoicas que
no son cancer; la zona muscular que rodea los conductos eyaculadores en la zona
central que usualmente es musculo iiso tendrá caracteristicas hipoecoicas que
no son cancer; zonas posteriores a biopsias prostáticas o a prostatitis severas
(focales o globales) podrían quedar con caracteristicas hipoecoicas, que no son
cancer, asi como posterior a prostatitis
granulomatosas ocasionada por numerosas causas. Es
importante definir las características ecográficas de los hallazgos sospechosos
de cáncer prostático especificamente de las lesiones focales ya que de ésta
manera precisaremos mas acuciosamente su etiología y su significación
histológica. Es asi como
resulta importante definir la cantidad de lesiones focales existentes, su
ubicación, su característica ecográfica (hipoecoica, isoecoica, ecogenica o
hiperecocica, anecoica o con patrones ecograficos mixtos), detallar la
precisión de sus bordes, la presencia o no de una halo circundante, la
presencia de calcificaciones internas o circundantes, la presencia de calculos
propiamente dichos, de cuerpos amilaceos, y las repercusiones que dicha lesion
focal produce en el tejido circundante (abultamientos capsulares o periprostáticos
a nivel de la grasa periprostática) así como a trasgresiones de la capsula
prostatica, ya que tendrán valor pronóstico y trascendencia a nivel del aspecto
terapeutico en cualquiera de sus modalidades (1,6,8,15)